¿Qué es la periimplantitis y cómo se trata?
La periimplantitis se identifica como una enfermedad que afecta los tejidos alrededor de un implante dental, por lo que sólo puede darse en pacientes que hayan atravesado dicho tratamiento. Esta se caracteriza por la inflamación de la encía y la pérdida de hueso alrededor del implante, pudiendo resultar realmente perjudicial para la estabilidad y el éxito del procedimiento a largo plazo.
Posibles tratamientos para la Periimplantitis
Limpieza y raspado profesional: el primer paso en el tratamiento de este problema es realizar una limpieza exhaustiva de los tejidos periimplantarios y el implante mismo, para eliminar cuidadosamente la placa y el cálculo dental acumulados.
Cirugía regenerativa: en casos avanzados, puede ser necesario recurrir a técnicas de regeneración ósea y tejidos blandos para restaurar la salud de estos, lo que implicaría el uso de injertos óseos y membranas que promuevan el crecimiento óseo y la regeneración de la encía.
Mantenimiento a largo plazo: tras haberse realizado el tratamiento inicial, es crucial mantener una buena higiene oral y acudir periódicamente a la clínica dental para el control y mantenimiento de los implantes.
¿Cómo identificar la Periimplantitis en el paciente?
Además de mencionar los tratamientos disponibles para la periimplantitis, es importante distinguir los síntomas que pueden indicar la presencia de dicha condición, siendo estos los más comunes:
Sangrado de encías: cuando se observa alrededor del implante dental, puede ser un indicio temprano de periimplantitis. Si detecta sangrado al cepillarse o usar hilo dental alrededor del implante, es conveniente consultarlo con su dentista.
Inflamación de encías: las encías alrededor del implante pueden aparecer inflamadas, enrojecidas y sensibles al tacto, como signo de la respuesta inflamatoria que causa la periimplantitis.
Mala cicatrización: si la cicatrización tras la colocación del implante resulta problemática o inadecuada, podría indicar la presencia de esta enfermedad.
Movilidad del implante: un implante dental exitoso debe ser estable y firme, de manera que si se da una movilidad o aflojamiento el mismo, debe buscarse atención dental de inmediato, ya que esto suele indicar algún tipo de complicación.
Retracción de encías: si las encías de alrededor retroceden exponiendo parte de la superficie del implante, probablemente indiquen una pérdida de hueso y tejido de soporte causada por la periimplantitis.
Mal aliento persistente: suele ser un indicador de esta enfermedad que se da por la presencia de bacterias, junto a la respuesta inflamatoria de los tejidos periimplantarios.
Ante cualquier señal, se recomienda acudir a consulta
Cabe resaltar que los síntomas pueden variar de un paciente a otro, así como su gravedad. Sin embargo, si experimenta alguno de los expuestos o tiene alguna preocupación acerca de sus implantes dentales, es recomendable programar una consulta con su dentista para una evaluación adecuada y un diagnóstico más preciso.
Finalmente, la periimplantitis es una condición seria que requiere atención y tratamiento profesional oportunos, pues la detección temprana y respuesta rápida, son fundamentales para preservar la salud de sus implantes dentales. Mantener una buena higiene oral, evitar el tabaquismo y recibir un cuidado dental regular, también son hábitos importantes a la hora de prevenir esta enfermedad.
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